Capitulo 22
Patricia tuvo im sueño large, nay largo.
No podia distinguir claramente los rostros de los protagonistas en su sueño, pero de alguna manera sentia que las personas del sueño eran ellos.
En el suede habla un hombre llamado Ramón Fernández. Él no era un estudiante pobre, sino el heredero del Grupo Fernández. Estaba dispuesto a dejar la Casa Feminder, renciar a su posición de heredero y seguir manteniendo a Patricia González, una niña que había sido débil y enfermiza desde pequeña. El era el tio que más la queria
Ramon cria Patricia y le dio un amor único, dandole todo lo que queria, como si le ofreciera las estrellas en lugar de la luna, dándole un cariño que no conocia limites.
Desde los ocho hasta los dieciocho años, é la cuidó y la mimó durante toda su infancia, pero ella, sin vergüenza, terminó enamorándose de Ramón.
Nadie la entendia, ni siquiera el mismo Ramón, quien en su momento fue el que más la cuidó
Ese hombre llamado Ramón retiró instantáneamente todo el amor que le habla brindado, comenzando una serie de citas a clegas, hasta que finalmente Devó a casa a una prometida que cumplía con todos los requisitos,
Ramon penso que, al hacerlo, ella se olvidaria de él.
Pero luego, la joven Patricia fue victima de un robo en su casa, y mientras la apuñalaban una y otra vez, la primera y única persona en la que pensó fue en
Patricia le llano, pero no contestó
Porque ese día, Ramón había dicho que su prometida tenia fiebre y que pasaría todo el día con ella.
¿Desde cuando Ramón comenzó a desinteresarse de Patricia? Parecia que fue desde el dia en que ella reunió el valor para confesarle sus sentimientos
Ramón se fu
sa fue volviendo cada vez más frio hacia ella, hasta que finalmente, ella murió, y su cuerpo fue metido en el armario por el asesino
Patricia nunca pudo ver a Ramón por última vez.
Su alma permaneció junto a su cadáver, sin poder irse, y aunque el alma no tiene emociones, Patricia Navarro aún sentía una profunda tristeza.
Ramón y no la quería.
Patricia Navarro también vio cómo, después de su muerte, hizo un trato con el Señor Mortius, y, a cambio de perder su alma, obtuvo siete días más para estar con Ramón. Cuando el regreso y la vio, la primera frase que le dijo fue reprocharle que le hubiera Damado tantas veces ese dia
Vio cómo, al no poder consumir comida humana, é, por una sola frase de su prometida, la obligó a comer esos alimentos, y aunque Patricia los rechazó por el dolor, el solo la culpó de hacerle pasar un mal rato a su prometida
Patricia tambien vio esa carta de amor que no pudo abrir antes de su muerte.
En su sueto, vio cómo, después de su partida, Ramón abrió esas cartas. Al final de cada una, estaba una firma conocida Patricia González.
Aunque vio claramente que su trato con el Señor Mortius habia llegado a su fin, y que realmente habia perdido su alma, Patricia no pudo dejar de pensar.
Patricia González era ella
Los sueños que siguieron confirmaron este pensamento.
Vio lo que ocurrió después de la desaparición de Patricia.
Vio a Hamón, desconsolado, cuando descubrió que Patricia ya habla muerto. Lo vio en su desesperación, perdiendo la razón, y vio cómo, después de ser recheado
por la familia Fernández, no mostró remordimientos, y comenzó a intentar suicidarse.
Lo vio en una bera llena de sangre, indentras su respiración se apagaba lentamente,
Después, Remón llego al infierno y se encontré con el Señor Mortius, con quien también hizo un trato.
Ahora Patricia tenda una nueva vida, una vida de riqueza, con padres saludables y amorosos
Pero sin d
Punque Ramón, usando todas las riquezas y todas las vidas que tendría en el futuro, habla intercambiado esa existencia por una en la que nunca más tendrien ningún tipo de relación.
Patricia volvió a encontrarse con el Setor Mortius, pero esta vez no era para quitarle la vida.
El Señor Mortius le contó todo a Patricia y luego le devolvió la libertad de elección.
Conociendo todo, della tornar la decisión final,
¿Perdonario? ¿O separarlos para siempre y verlos como dos personas distintas?
El Ramón que era ahora no era el mismo de antes, pero cuando Patricia recordo todo, se dio cuenta de que no podia aceptarlo.
No importaba si era Ramón Fernández Ramón Pérez
Π
No importaba si era su tio o su compañero de clase